LL | Latling: 12th International Colloquium on Latin Linguistics |
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Publication | program: Tuesday, June 10 | Wednesday, June 11 | Thursday, June 12La filosofía aristotélica podría analizar el razonamiento que lleva a una decisión como un proceso de "silogismo práctico" con una deliberación ética sobre medios y fines. Desde la semántica lingüística podría entenderse una realización intersubjetiva y otra intrasubjetiva del proceso, atendiendo a la deliberación sobre una acción propia o sobre una ajena. El referente del sujeto puede aparecer reflejado con el lenguaje de la singularidad o de la multiplicidad, con lo que hay que contar con un factor de cuantificación manipulable, que se puede complicar con una individualización cualificada. En la focalización informativa de este sujeto se concreta una forma lingüística de la primera fase del proceso (delibero, decerno, censeo). Por otra parte, la fase intermedia (previa a la acción o consecuencias) adquiere la apariencia de un proceso informativo, luego sujeto a verificación y a compromiso del hablante con la veracidad del enunciado. En el nivel informativo, el proceso puede opcionalmente describirse también desde su causa o inducción, que comprende una fase intersubjetiva inicial: alguien requiere de otro la información sobre la decisión que éste ha elaborado o va a elaborar. Por tanto, se puede combinar la modalidad interrogativa con la enunciativa, con una consecuencia idiomática: cambia la selección del vocabulario de una modalidad a otra. (censere, constituere, decernere). Pero la sintaxis latina nos muestra una articulación de este proceso por medio de verbos y expresiones introductorias de un contenido proposicional. Ello permite una cierta modulación expresiva. A través de la sintaxis tenemos abierta también otra posibilidad: focalizar la noción de beneficio o de destinatario. Esta opción se entiende porque el proceso total combina varios referentes codificables como suietos. o con la categoría nominal del dativo. Además, el grado de compromiso con la veracidad del enunciado puede complicarse con una sintaxis típicamente evidencial, en la que el agente de la decisión queda expresivamente al margen de ella, como un suceso externo y hasta cierto punto objetivo, que le afecta o le compete (cerium est mihi/videtur mihi). Otras veces, el uso del dativo permite expresarlo como la aceptación de una propuesta (placuit). Al final, el resultado último del proceso de la deliberación es acción, pero también puede ser sententia, pensamiento y condena. En cuanto a la primera, la proposición introducida admite también matices actanciales en virtud de la variación diatética. Todo ello implica distinciones estilísticas. |